martes, 9 de marzo de 2010

Vía de la Plata a Santiago, Etapa 15



De Camino a Santiago por la Vía de la Plata. Fase 3. 2009. De Aljucén a Cañaveral


Etapa 15.- Embalse de Alcántara – Cañaveral (antes a Grimaldo)

Como siempre son las primeras luces de la mañana las que acompañan nuestro despertar matutino. Lentamente pero con mucho ánimo tras el descanso nocturno que nos ha permitido recuperarnos de la agotadora jornada de ayer.

Hoy tenemos prevista una jornada que podría considerarse corta ya que serán unos veinte kilómetros aparentemente fáciles de recorrer. De todos modos y por previsión, tenemos el teléfono de un taxista de Cañaveral por si a la hora de emprender la marcha los dañados pies de Vir no lo permiten y lo cierto es que no vamos a forzar para que sea peor el remedio que la enfermedad.
Con el material que nos dejaron anoche nos hemos preparado el apetecible desayuno y después de deliberar en grupo nos ponemos en marcha manteniendo el programa de llegar hasta Grimaldo. Dejamos el Albergue y recorremos en sentido contrario al de ayer por la tarde los 500 metros que nos separan de la N-630 que cruzamos y justamente enfrente comienza un sendero debidamente señalizado por el habitual bloque de hormigón y que nos indica la subida hasta una colina (Cerro Garrote). Después de un breve descanso y contemplando una bonita vista del Embalse y sus alrededores nos adentramos en el llano que nos llevará a Cañaveral.

El camino que recorremos discurre por la Calzada Romana a través de un desolado paisaje cubierto únicamente por alguna encina y matorrales y por el que transitamos cómodamente. Sólo compadecernos de los peregrinos que afrontan el camino en el caluroso verano.

Poco tiene que contar por ahora esta etapa salvo que ya avanzada observamos en la lejanía los primeros toros bravos, negros e impresionantes. Suponemos son imágenes que se repetirán especialmente en las etapas por Salamanca. A medida que la jornada avanza observamos que nuestro ritmo de marcha no puede ser catalogado de espectacular. Quizás sea que por precaución pero voluntariamente no queremos forzar aunque Vir no se queja.

Ya cerca de Cañaveral empezamos a barruntar hacer un alto en esta primera población para ver si definitivamente Vir puede continuar sin que termine por destrozarse los pies.
Y entonces hemos determinado seguir el camino hasta el pueblo en lugar de hacerlo hacia la estación del ferrocarril y continuar después hasta Grimaldo.
Después de cruzar el puente de San Benito (siglo XIV) alcanzamos una vez mas la N-630 y callejeamos entre casas encaladas en busca del Ayuntamiento.

Allí nos sellan las credenciales e indican los horarios del tren a Madrid y de los autobuses a Sevilla. Porque, definitivamente, finalizamos esta Tercera Fase de nuestro Camino a Santiago.
Al final de la Calle Real (¡Típico nombre en muchos pueblos de España!) localizamos el Hostal Málaga, donde aprovechamos que nos queda algo de tiempo hasta que llegue el tren destino Madrid y comemos el menú del día, normal y sin grandes sorpresas ni en precio ni en calidad.

El grupo se deshace. Allí mismo está la parada del autobús que debe tomar Mayse y nosotros dejamos Cañaveral buscando la vía del tren. Nos lo han recomendado porque seguir por la carretera es un trayecto mas largo.
Finalmente llegamos a la estación, compramos los billetes y a los poco minutos “hace su entrada el TRD nº 17027 que en breve efectuará su salida destino Madrid-Atocha”.
Ya en el viaje a casa y durante las tres horas y media que dura el trayecto, empezamos a preparar mentalmente la Fase IV de este Camino a Santiago.